Mostrando entradas con la etiqueta pánico escénico. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta pánico escénico. Mostrar todas las entradas

sábado, 16 de enero de 2016

Que se salven los humoristas. (Gracias a Pepe Macías)




Hace unos días que estoy haciendo un curso de guionista de monólogos de humor. Y ya sé que me puedo dedicar a cualquier cosa en la vida... menos a eso.

Pepe Macías, un señor muy serio e introvertido, era el encargado de enseñarnos cómo hacer reír, y lo explicó muy bien, puso documentos visuales, hizo esquemas, análisis y comentarios...y les aseguro que lo entendí todo, pero por lo visto desde el váter de la escuela mi humor no llegaba con la misma intensidad al público.
Me pasé más tiempo intentando controlar mis esfínteres que atendiendo a Pepe. Si él supiera...

Desde el primer día yo llevaba mis monólogos muy trabajados, como una buena alumna, investigué, y me metí de lleno en el mundo del humor y la comicidad, dejé de ver el Debate del Estado, y de cantar canciones de Malú, y me puse Gran Hermano y a Luis Aguile.
Pero ni por esas conseguía sacar mi bis cómica.

Intenté hacer espiritismo para contactar con Lina Morgan, o con Groucho Marx, pero me salió Espronceda y cuando me dí cuenta había escrito dos Romanzas y un Soneto épico.

¡No puedo!, Dios mío ayúdame, con lo poco que me cuesta hacer llorar, sobre todo a mis padres, cuando les pido dinero, y que dificil es hacer reir, sobre todo a mis padres cuando les pido dinero.

Pero aunque me tachan de inconstante, me dije a mi misma que conseguiría hacer un gran guión, me llevé dos días con sus dos noches escribiendo, estudiando, interpretando cada chiste, no he trabajado tanto en toda mi vida;...es lo que tiene estar parada..., y por fín estaba preparada para ejecutarlo. Había decidido dejarlo para el último día, y esperar a que todos mis compañeros hicieran el suyo, estaba segura de que triunfaría, era muy buen material, pero justo cuando iba a salir al escenario...el curso terminó.

Por un lado me vino bien porque la verdad es que yo ya había intentado un guión el primer día, y tampoco era cuestión de castigar al público innecesariamente, pero me quedé con las ganas de exponer mi gran trabajo. Una fantástica historia basada en hechos verídicos que me estudié al detalle, pero justo cuando me tocaba a mí, mis neuronas decidieron morir en suicidio colectivo... y me quedé mirando a Pepe y pensando...!Que bien le queda el bigote aunque esté calvo¡...

Se me apagaron los circuitos, me dió un ataque de pánico y sólo podía pronunciar una palabra...Alzheimer...

Me quedé "estrupefacta", "anonanada", "inversátil"....agilipollá!

Gracias a Dios el humor en el mundo no depende de mí...siempre habrá un Pepe Macías, o un Papa Francisco que me saque una sonrisa, y si no siempre puedo escribir yo un monólogo, no me reiré pero al menos desearé más la muerte.

Por ello tengo una gran admiración por los humoristas. Creo que deberían ser los primeros en subir a los cohetes para Marte cuando la tierra se vaya a la mierda, aunque también podrían quedarse y por lo menos nos echamos unas risas antes de morir todos.

Son los que consiguen que nuestro paso por la existencia sea más llevadero, nos cambian una lágrima por una sonrisa sin darnos cuenta, y no piden nada a cambio...bueno...también porque saben que está la cosa muy mala.
- Una sonrisilla señora...que no es para vicios...

Los humoristas nunca son ricos, no llevan una vida aburguesada, en todo caso hamburguesada, pero siempre entregados a hacer feliz a la gente, tanto si gusta su pepinillo como si no.

Yo quisiera hacer algo también por los demás, me gustaría hacer a la gente feliz con mis monólogos, aunque puede que les hiciera más felices si dejara de hacerlos. Al fin y al cabo siempre puedo hacerme voluntaria de Unicef en África...a lo mejor me dejan contar algún chiste... si no le quito el apetito a la gente , porque  allí el humor siempre ha sido muy negro...

Me quedo con la satisfacción del trabajo bien hecho, porque como no se lo he enseñado a nadie, yo digo que está bien hecho y punto. Y me quedo con la satisfacción de haber conocido a unos compañeros maravillosos a los que no olvidaré nunca, ...sobre todo porque ellos sí expusieron sus trabajos, dos veces,... mamones...

Así que hoy quiero dedicar este artículo a mi profesor Pepe Macías, un humorista increíble, un showman auténtico, un estúpido que no me dejó diez minutos para decir mi monólogo...aunque fuera desde el vater...pero que espero que tenga una carrera de éxito, y una vida hamburguesada, y que se acuerde de mí siempre que necesite a alguien que no sea capaz de hacer absolutamente nada encima de un escenario...pero que domine lo que es el humor inteligente ...sobre todo desde el váter.

Un abrazo Gran Líder y vuelve pronto..que tengo un par de monólogos para enseñarte...o siete.











jueves, 21 de mayo de 2015

Quieres ser Gacela o León

Siempre hablo de actitudes ente la vida, aconsejo aunque eso no quiere decir que en todos los casos yo siga mis propios consejos, en muchas ocasiones son mis palabras la que me dan aliento para hacer aquello que sé que se debe hacer,  es por eso que hoy mi consejo va para mí. 

A veces en esta vida nos vemos en una de esas situaciones en las que casi preferirías morir a estar, esas veces que tenemos que hacer algo, sí o sí, y por gracia divina esa situación nos produce un miedo incontrolable. Es como si no tuvieras más remedio que subir a la montaña Rusa de tus temores más profundos y la gente aglomerada no te permitiera volver atrás, y te vieras arrastrado y muerto de miedo. 
Así que afrontados o no esos miedos, caemos como una presa en las garras de la vida preciosamente caótica que tenemos. Y yo me pregunto: ¿que quieres ser gacela o león?.La bestia a la que temes te va a devorar de todas maneras, ¿ prefieres ser víctima y dejarte morir con un ultimo aliento de debilidad? o ¿enfrentarte como un león?, arañando, mordiendo, rugiendo, peleando hasta el último instante, si tras eso va a estar el final, echar todo el resto en sobrevivir...

Pronto me las voy a ver en una de esas. No tengo ni idea si saldrá bien, o..., ahí me quedo, no soy capaz ni siquiera de imaginar que es eso que tanto me asusta, ese monstruo que me dejará mi verdad sin traje, un espejo roto, mi yo verdadero...y juro que desearía salir corriendo para otro sitio, que algo más fuerte que yo me ayudara,  pero ya estoy en un momento sin retorno...tomé tanta energía que si frenara moriría irremediablemente, ¿lo que me asusta de seguir? todo. Pero por lógica he resuelto que el león tiene más probabilidades de vida que la gacela, y ya que tengo que caer, yo he he decidido amarrarme los machos, y morir arañando y peleando, que la vida tenga que arrancarme cada trocito de mi existencia. no pienso regalarle ni un solo segundo, quizás muera en sus fauces igualmente, pero haré mi vida interesante hasta el ultimo instante.

Cuando viene uno de esos momentos en los que hay coger el toro por los cuernos....yo voto por "coger el toro por los cuernos", "nada se ha escrito de los cobardes" y " seguro que todo sale bien". Repito una y otra vez, es fácil y ayuda mucho.

Bueno las frases están muy bien, y yo sé lo que tengo que hacer pero ahí estoy, esperando, supongo que espero a que venga alguien a sustituirme pero eso no es posible, así que simplemente espero, me preparo, me relajo, confío en mi, y me visualizo en ese instante que me aterroriza, me veo afrontándolo con valor, me veo defendiéndome, derrotando al miedo, y dejo que ese pensamiento se asiente en mi espíritu, poco a poco, día a día, no huyo, ya sé que va a ocurrir, es una operación, una reunión donde van a despedirnos, una actuación en público, o un encuentro irremediable con alguien que nos rompió miserablemente el corazón, vamos a pasar por ese instante, y si la imagen que adjuntamos a esa sensación horrible es:  una recuperación perfecta, un trabajo mucho mejor conseguido tras el despido, un éxito rotundo, o una sensación de perdón para ese amor que descubrimos que ya no lo es..., seguramente iremos a ese mal momento con la respuesta en nuestra mano, y creo firmemente que incluso lo más probable es que ocurra así, porque como decía al principio actuar así es ser León, y eso ya nos da una ventaja. 

Quien prefiera pasar por ese nudo llorando y penando por las esquinas, ayá con sus decisiones, pero yo me revelo, y decido luchar, decido seguir, enfrentarme. Reiré si consigo ganar, pero si algo fallara...al menos le habré puesto las cosas difíciles a ese monstruo...y me iré con la satisfacción de haberme superado a mi misma, aunque haya caído, pero caeré con orgullo, el orgullo y la dignidad de un León..